Uno de los escenarios más peligrosos a los que nos podemos enfrentar cuando nos ponemos al volante de un vehículo es el de conducir con lluvia. Si siempre hemos de poner toda nuestra atención, en estos casos hemos de redoblarla. Cuando llueve, los neumáticos pierden adherencia, se reduce la visibilidad y aumenta la distancia de frenado. De hecho, las estadísticas de la DGT demuestran que, en estos contextos, aumentan los accidentes en carretera. Por eso, tenemos que prestar especial atención a uno de los elementos más relacionados con la seguridad: los neumáticos de coche.

Además de reforzar nuestra atención y reducir la velocidad para, entre otras cosas, no sufrir el temido aquaplaning, hay que respetar al dedillo las pautas de mantenimiento del vehículo en general y de los neumáticos en particular. Estos forman parte esencial del sistema de dirección, frenado y estabilidad del coche. Sobre todo, en las épocas de precipitaciones y en las zonas en las que estas sean más frecuentes hemos de contar con los mejores neumáticos para lluvia. Es por eso que recomendamos hacer un cambio de neumáticos para prevenir estas situaciones. Si no sabes cómo hacerlo, consulta la Comparativa neumáticos All Season 2022.

Además de atender a una serie de consejos para conducir con lluvia, hay que procurar llevar los neumáticos adecuados para circular bajo condiciones adversas.

conducir bajo la lluvia


Peligros más frecuentes de conducir con lluvia

¿Qué es el aquaplaning?

Al conducir bajo la lluvia, uno de los mayores peligros es el aquaplaning. También llamado hidroplaneo, es un fenómeno que provoca que el vehículo derrape descontroladamente. Se produce porque los neumáticos no consiguen tener buen agarre en el asfalto por la capa de agua que lo cubre. Es decir, se produce cuando se forma una cuña de agua entre el neumático y la superficie de la carretera. El conductor ya no tiene control sobre el vehículo dado que los neumáticos no se adhieren a la carretera.

¿Cómo actuar ante un aquaplaning?


  • Si conducimos en una recta: conduce suavemente con el volante quieto y firme, soltando poco a poco el acelerador.
  • Si nos encontramos en una curva: hacer el giro suave y sutil, levantando el pie del acelerador progresivamente.


  • qué puedo hacer para evitar el aquaplaning


    Agua en el parabrisas

    Otro peligro es la lluvia acumulada en el parabrisas. Sumada a las luces de la carretera y a las del resto de los coches, produce el llamado “efecto prismático” causando cegueras temporales a los conductores. Dicho de otro modo, la luz, reflejada hacia el interior del coche impide la visión periférica y frontal y puede causar retrasos en los tiempos de reacción.

       

    ¿Cómo conducir con lluvia intensa? 5 consejos para ayudar en tu seguridad

    Como decimos, conducir con lluvia exige que redoblemos la atención. Entre otras cosas, porque se va a dar una disminución de la adherencia de los neumáticos. El asfalto será deslizante y se creará una película de agua. Sobre todo, cuando las precipitaciones son elevadas. De ahí el temido aquaplaning. Además, la suciedad del firme mezclada con el agua hace que las carreteras sean más resbaladizas. Por eso, queremos repasar cinco consejos básicos para conducir en estas circunstancias:

      1. Atender al correcto mantenimiento del vehículo

    Para conducir en condiciones climatológicas adversas, has de revisar una serie de elementos del coche para circular con seguridad. Lo primero, las ruedas. Han de estar en buen estado y no gastadas. Ten presente que son el punto de contacto del coche con el asfalto. Deben tener el dibujo con la profundidad suficiente para evacuar el agua que pisen. La mínima por ley son 1,6 mm. De todos modos, con lluvia fuerte, si está por debajo de los 3 mm se verá comprometida la evacuación efectiva del agua por los surcos de la rueda.

    Si necesitas más información sobre cómo elegir, consulta ¿Cómo elegir el mejor neumático para mi coche? Es importante además tener los neumáticos con la presión adecuada. Si está por debajo, el dibujo de la banda de rodadura se deformará más de lo debido. Como consecuencia, se reducirá la capacidad de la rueda de evacuar el agua por los canales de drenaje. En resumen, cuanto mayor sea la profundidad del neumático mayor será la capacidad para evacuar el agua y reducir el aquaplaning.

      2. Vigila amortiguadores, frenos y limpiaparabrisas

    Los amortiguadores son esenciales en el comportamiento del coche, para controlar los movimientos de la carrocería y para mantener el eje delantero y el trasero sin pérdidas de adherencia. En cuanto a la importancia de los frenos, con la calzada mojada, su efectividad disminuye y la frenada se alarga. Hay que vigilar las pastillas, los discos y la presión del circuito de frenado. Si es necesario, se hace un cambio de pastillas de freno.

    En lo relativo a los limpiaparabrisas, procura que estén en buen estado. Con lluvia la visibilidad se reduce y el cristal ha de estar libre de agua. Aunque tengan poco uso, la goma se reseca y pierde efectividad. Como consecuencia, barre menos y compromete la visibilidad. El nivel del líquido del depósito del limpiaparabrisas debe ser el adecuado, incluyendo anticongelante.Para estos casos, es útil contar con un Taller mecánico móvil que pueda revisar y cambiar estos elementos cuando sea necesario.

      3. Circula con la luz adecuada y usa el sistema de climatización

    Cada vez más coches llevan faros con luz diurna. Si no los tienes, cuando llueva pon las luces de cruce. El sistema de climatización debe funcionar en condiciones y los difusores de aire para los cristales estar limpios para eliminar el vaho. Lo ideal es fijar la temperatura a 20º – 21ºC.

      4. Adecúa la velocidad

    Con lluvia hay que reducir la velocidad, adecuándola al estado de la calzada. Aumenta la distancia de seguridad para evitar que el agua pulverizada que sale de las ruedas del coche que te preceda reduzca tu visibilidad.

      5. Frena con suavidad

    Ante una curva, anticipa la frenada y realízala con la dirección lo más recta posible para evitar las inercias laterales. Cualquier cambio de dirección o maniobra tiene que ser lo más suave posible.

    Sigue estos consejos para mejorar tu conducción y prevenir posibles riesgos en la carretera. Conducir con lluvia no será ningún problema. Si tienes cualquier duda puedes ponerte en contacto con nuestros expertos y ellos te ayudarán.